domingo, 31 de marzo de 2019

Manifiesto IV Semana Igualdad

IV SEMANA DE LA IGUALDAD
XV JORNADAS EDUCATIVAS

         Hace quince años que desde nuestro instituto decidimos que íbamos a trabajar para cambiar las cosas, para cambiar la mirada del alumnado y ayudarle a ver el mundo con esas gafas violeta que nos muestran a las claras la sociedad desigual en la que vivimos.

         Porque hay veces que miramos sin ver: no vemos a nuestras madres trabajando todo el día y sin fines de semana y creemos que solo trabaja quien trae un sueldo a casa. O vemos bromas en clase, en el patio, en la calle, donde solo hay humillación y burla. O solo vemos en los demás sus rarezas– y les llamamos frikis –, sus aficiones que no son las nuestras, su manera de vestir,  sin llegar a  ver todo lo que pueden aportar, todo lo que podemos compartir.

         Pero cambiar esa mirada fue el primer paso. Nuestro objetivo era cambiar la comunidad. Y a eso nos ayudó todo el mundo, colegios, asociaciones, ampas, ayuntamiento. Todo el mundo puso su granito de arena, pintando zapatos de rojo, o participando en la gymkana, ofreciendo su tiempo y su ilusión, diciendo sí a cada propuesta año tras año.

         Esta comunidad no es la misma de hace quince años. Hoy es el pueblo de las mujeres que reclaman su calle en videos que han recorrido todo el mundo y el que celebra sin complejos el orgullo serrano colocando una gran bandera arcoíris en la plaza. Queremos pensar que nuestro centro ha contribuido también a ese cambio.

         Tenemos, pues, que estar contentos, pero no debemos sentarnos a mirar lo realizado. Hemos trabajado –y seguimos haciéndolo – por visibilizar la situación de las mujeres, pero quedan muchas desigualdades contra las que luchar.  Y para ello tenemos que tener claro que todos necesitamos de los demás y que para lograrlo, para vivir juntos y ayudarnos, necesitamos ponernos en sus zapatos, hacer el esfuerzo de ver el mundo con sus ojos.

         Porque hay muchas formas de habitar el mundo, de entenderlo, de vivir las relaciones, de formar familias, de sentir quienes somos. Y todas esas miradas diferentes  deben sentir que este puede ser su lugar en el mundo.

         Porque lo que nos hace diferentes no es nuestra manera de vivir, ni nuestras decisiones. Lo que nos coloca fuera de la comunidad es la mirada de los otros. Descubrir que mi amigo de la escuela es homosexual no lo cambia a él. Si algo cambia es mi mirada. Porque su imagen se pierde tras los prejuicios y miedos y dejo de verle.

         Y así volvemos al principio. Necesitamos cambiar la mirada o, tal vez mejor, necesitamos mirar a los ojos, rescatar a la persona que hay detrás y no vemos, que no será un inmigrante, un discapacitado, ni una anciana, ni un transgénero, sino alguien con una historia, con una familia, con su carga de dolores y amores. Una persona.
      Sigamos trabajando para que nuestra comunidad sea lugar de acogida y refugio de lenguas, historias y miradas diferentes, que nos enriquezcan. Y propongámonos rescatar a esa persona oculta tras los prejuicios. Hagámoslo y nos daremos cuenta de que, finalmente, nos habremos rescatado a nosotros mismos.

Alejandro Albaladejo del Castillo


sábado, 30 de marzo de 2019

=AT!

Si piensas que la sociedad en la que vives, tu bloque, tu barrio, tu pueblo, tu ciudad, necesitan usar la visión ultravioleta de la igualdad, iguálate 

 

jueves, 21 de marzo de 2019

XV Jornadas Educativas, IV Semana de Igualdad

Cartel de Tótem Stamp

De pronto, un día, te das cuenta de que los días se van alargando.

Y de repente, te sobran los calcetines gordos, aunque aún no es tiempo de medias.

Dudas si echar la tarde trabajando o echar a andar por el campo detrás de tu mascota disfrutona.

Pero lo que es indudable es que se acerca la Semana de la Igualdad, y se nota este año más que otros. ¿En qué? Pues, por poner algunos ejemplos, encuentras reuniones espontáneas alrededor de cartulinas, reglas y cutters; o un video animando al personal a participar en la tele de la entrada; puede incluso que haya varias notas o anuncios superpuestos en la pizarra de la Sala atropellándose unos a otros para conseguir captar la atención del profesorado; y esos mismos anuncios y notas te los cruzas en versión digital en el grupo de Whatsapp del centro... Todo a la vez que se van corrigiendo lotes inmensos de cuadernos, exámenes o láminas de dibujo, sacando medias y peleándonos con Séneca por no estar operativo cuando se le necesita.

La razón de todo este revuelo es que nuestro centro tiene un objetivo comun: llevamos una trayectoria de 15 años trabajando para que nuestro alumnado y nuestra comunidad vean y compartan la necesidad de no dejarnos a nadie atrás. Empezamos por las mujeres, pero ahora no queremos que ninguna diversidad quede excluida. 

Nuestro lema de esta Semana, =AT!, es una llamada para promover y celebrar la empatía, la solidaridad, el civismo, el trabajo cooperativo de toda la sociedad y el voluntariado. Celebrar las diferencias sabiendo que todos las tenemos y que eso es precisamente lo que nos permite igualarnos, ponernos en la piel de la otra persona y comprender sus dificultades para superarlas de manera conjunta. 

Idea original del logo de Carmen Rguez. Toro, realizado por Tótem Stamp
Conseguir cambiar una visión que discrimine por una visión que nos humanice... Ese sería el superpoder.